"Queridos diocesanos:
Iniciada ya la campaña del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, me pongo en comunicación con vosotros para recordaros que como contribuyentes, a la hora de hacer la Declaración de la Renta correspondiente al año 2013, como en años anteriores tenéis la posibilidad de dedicar el 0,7 por ciento de vuestros impuestos al sostenimiento de la Iglesia católica. Los ingresos económicos que pueda tener la Iglesia, dependerán solamente del numero de contribuyentes que opten por asignarle el porcentaje de sus impuestos".
MARCAR LA CASILLA DE LA IGLESIA
"Para ello es preciso marcar la casilla de la Iglesia católica al hacer la Declaración de la Renta, manifestando de esta forma el compromiso con la mision ya las actividades Eclesiales. Esto no conlleva pagar mas impuestos ni supone que a uno le devuelvan menos si su declaración de la Renta resulta negativa. Bien conocéis la labor Pastoral y asistencial de la Iglesia (en España). Baste recordar las mas de 23.000 parroquias, cerca de 850 monasterios de clausura, mas de 200 hospitales y ambulatorios, mas de 300 guarderías, mas de 900 orfanatos, mas de 1.600 centros de acogida y reinserción social y familiar. Son otras tantas instituciones puestas al servicio de las personas en orden a responder a sus necesidades materiales y espirituales.
Estas actividades son realizadas en su mayoría por personas que entregan su vida a los demás, en una labor discreta y muchas veces ignorada, que construye el bien común de la sociedad".
CIBREN ENTRE EL 25 Y EL 30% DE SUS
NECESIDADES
"Los ingresos obtenidos a través de la asignación del 0'7% a la Iglesia suponen entre el 25% y el 30% de sus necesidades y el resto lo recibe de las aportaciones voluntarias de los católicos y de personas que no compartiendo nuestra fe, saben de las actividades benéficas de la Iglesia, que ayuda a los mas necesitados de la sociedad; a los sin techo, a las familias rotas y desestructuradas, a los inmigrantes, a los ancianos, a los enfermos, etc. No podemos dar culto a Dios sin velar por el hombre, promoviendo su desarrollo verdadero, y promoviendo valores como la solidaridad, la justicia ya la convivencia pacifica. Una sociedad sin valores es una sociedad sin futuro.
Os agradezco que marquéis la casilla de la Iglesia Católica para seguir haciendo algo por tantos que necesitan tanto. Os saluda y bendice en el Señor".
Julián Barrio Barrio